Nehemías 1

Nehemiah 1
 
El corazón de Nehemías y el del rey gentil
Por gracia, la fe había establecido el altar, y los gentiles no habían tenido nada que ver con él, excepto por el servicio voluntario; pero cuando la ciudad ha de ser reconstruida, es el gobernador designado por los gentiles quien ocupa el lugar prominente, habiendo tocado Dios el corazón de estos gentiles y disponiéndolos a favorecer a su pueblo. Vemos en Nehemías mismo un corazón tocado con la aflicción de su pueblo, una preciosa muestra de la gracia de Dios; y el que había producido este sentimiento dispuso el corazón del rey para conceder a Nehemías todo lo que deseaba para el bien del pueblo y de Jerusalén. Vemos también en Nehemías un corazón que habitualmente se volvía a Dios, que buscaba su fuerza en Él, y así superaba los mayores obstáculos.