¡Oh! enséñanos a adorar (#309)

 
Cuan dulce sëa la canción
No importa a Ti, Señor,
Si no rebosa el corazón
Tocado por tu amor.
¡Oh! en reverencia enséñanos,
Señor, cómo adorar;
Tu gracia inspire a cada voz
Que a tu oído ha de llegar.
Por sangre, tuya, idóneos ya
De entrar para adorar,
Aun ante el trono en luz allá
Nos haces acercar.
¡Precioso nombre! abriéndonos
La entrada en santidad, —
Confiados ya ante nuestro Dios,
Gozamos libertad.
“De labios fruto”, ¡oh! haznos dar
En grata adoración;
De santos “vivos” sólo, el loar
Te agrada el corazón.
Traducción ©1965 Messages of God's Love Multilingual. Todos derechos reservados. Usado con permiso.