Llamados por ti arriba (#427)

 
Llamados por Ti arriba, hombres somos
De nacimiento nuevo y celestial;
Culpables antes, éramos extraños
Del mundo ciudadanos cada cual;
Mas como peregrinos ya anhelamos
Llegar a tu mansión y eterno hogar,
Por todos esos siglos venideros
De tan gran suerte en luz participar.
Millones de millones de tus santos
De cualquier patria se congregarán;
Los unos a los otros redimidos
Con gozo grande se saludarán;
Mas la bendita excelsitud gloriosa
De eterno éxtasis, Señor, será
Löarte por la hermosura tuya,
Y compartir contigo el gozo allá.
Tú fuiste aquí la imagen justa, exacta,
Del invisible al ojo del mortal;
Venido de su seno, de ver se echa:
“Dios es amor” en Ti, Jesús, cabal:
Tus labios nos revela al Padre a todos;
Sentimos en tus dichos gran poder;
Con almas ya arrobadas hoy Te oímos
Contándonos tus glorias que han de ser.
No diste al hombre maldición alguna:
Tu gracia soberana se mostró;
Despliegas hoy la majestad y gloria
De Dios, sin velo: el cielo ya se abrió.
De compasión tan lleno, Te atrajiste
Al miserable y flaco alrededor;
¡Oh buen Pastor!, fue tu gran gozo siempre
Buscar al extraviado en tierno amor.
La lanza de la enemistad humana,
Preciosa fuente de agua y sangre abrió;
De tu costado traspasado en ira
La “sangre” de expiación total “salió.”
De nuestras culpas “rojas cual la grana”,
Por su virtud tal sangre nos limpió,
E irreprensibles ante Ti, y sin mancha
Comprados, limpios … ya nos acercó.
Conviene, pues, que como extranjeros
Vivamos santamente, sin desear
En este sitio malo establecernos,
Do el hombre Te llegó a rechazar.
Los lazos que ayer nos cautivaron
Tu cruz rompió … ganaste nuestro amor;
Ya nuestros corazones Te abrazaron:
Tesoro excelso allí en tu resplandor.
Traducción ©1965 Messages of God's Love Multilingual. Todos derechos reservados. Usado con permiso.