Articles on

Psalm 68

Sal. 68:30 KJV (With Strong’s)

+
30
Rebuke
ga`ar (Hebrew #1605)
to chide
KJV usage: corrupt, rebuke, reprove.
Pronounce: gaw-ar'
Origin: a primitive root
λthe company
chay (Hebrew #2416)
alive; hence, raw (flesh); fresh (plant, water, year), strong; also (as noun, especially in the feminine singular and masculine plural) life (or living thing), whether literally or figuratively
KJV usage: + age, alive, appetite, (wild) beast, company, congregation, life(-time), live(-ly), living (creature, thing), maintenance, + merry, multitude, + (be) old, quick, raw, running, springing, troop.
Pronounce: khah'-ee
Origin: from 2421
of spearmen
qaneh (Hebrew #7070)
a reed (as erect); by resemblance a rod (especially for measuring), shaft, tube, stem, the radius (of the arm), beam (of a steelyard)
KJV usage: balance, bone, branch, calamus, cane, reed, X spearman, stalk.
Pronounce: kaw-neh'
Origin: from 7069
, the multitude
`edah (Hebrew #5712)
a stated assemblage (specifically, a concourse, or generally, a family or crowd)
KJV usage: assembly, company, congregation, multitude, people, swarm. Compare 5713.
Pronounce: ay-daw'
Origin: feminine of 5707 in the original sense of fixture
of the bulls
'abbiyr (Hebrew #47)
for 46; --angel, bull, chiefest, mighty (one), stout(-hearted), strong (one), valiant.
Pronounce: ab-beer'
, with the calves
`egel (Hebrew #5695)
a (male) calf (as frisking round), especially one nearly grown (i.e. a steer)
KJV usage: bullock, calf.
Pronounce: ay-ghel
Origin: from the same as 5696
of the people
`am (Hebrew #5971)
a people (as a congregated unit); specifically, a tribe (as those of Israel); hence (collectively) troops or attendants; figuratively, a flock
KJV usage: folk, men, nation, people.
Pronounce: am
Origin: from 6004
, till every one submit
raphac (Hebrew #7511)
to trample, i.e. prostrate
KJV usage: humble self, submit self.
Pronounce: raw-fas'
Origin: a primitive root
himself with pieces
rats (Hebrew #7518)
a fragment
KJV usage: piece.
Pronounce: rats
Origin: contracted from 7533
of silver
keceph (Hebrew #3701)
silver (from its pale color); by implication, money
KJV usage: money, price, silver(-ling).
Pronounce: keh'-sef
Origin: from 3700
: μscatter
bazar (Hebrew #967)
to disperse
KJV usage: scatter.
Pronounce: baw-zar'
Origin: a primitive root
thou the people
`am (Hebrew #5971)
a people (as a congregated unit); specifically, a tribe (as those of Israel); hence (collectively) troops or attendants; figuratively, a flock
KJV usage: folk, men, nation, people.
Pronounce: am
Origin: from 6004
that delight
chaphets (Hebrew #2654)
properly, to incline to; by implication (literally but rarely) to bend; figuratively, to be pleased with, desire
KJV usage: X any at all, (have, take) delight, desire, favour, like, move, be (well) pleased, have pleasure, will, would.
Pronounce: khaw-fates'
Origin: a primitive root
in war
qrab (Hebrew #7128)
hostile encounter
KJV usage: battle, war.
Pronounce: ker-awb'
Origin: from 7126
.

More on:

+

Cross References

+

Ministry on This Verse

+
Rebuke.
2 S. 8:1‑18• 1Después de esto aconteció, que David hirió á los Filisteos, y los humilló: y tomó David á Methegamma de mano de los Filisteos.
2Hirió también á los de Moab, y midiólos con cordel, haciéndolos echar por tierra; y midió con dos cordeles para muerte, y un cordel entero para vida; y fueron los Moabitas siervos debajo de tributo.
3Asimismo hirió David á Hadad-ezer hijo de Rehob, rey de Soba, yendo él á extender su término hasta el río de Eufrates.
4Y tomó David de ellos mil y setecientos de á caballo, y veinte mil hombres de á pie; y desjarretó David los caballos de todos los carros, excepto cien carros de ellos que dejó.
5Y vinieron los Siros de Damasco á dar ayuda á Hadad-ezer rey de Soba; y David hirió de los Siros veinte y dos mil hombres.
6Puso luego David guarnición en Siria la de Damasco, y fueron los Siros siervos de David sujetos á tributo. Y Jehová guardó á David donde quiere que fué.
7Y tomó David los escudos de oro que traían los siervos de Hadad-ezer, y llevólos á Jerusalem.
8Asimismo de Beta y de Beeroth, ciudades de Hadad-ezer, tomó el rey David gran copia de metal.
9Entonces oyendo Toi, rey de Hamath, que David había herido todo el ejército de Hadad-ezer,
10Envió Toi á Joram su hijo al rey David, á saludarle pacíficamente y á bendecirle, porque había peleado con Hadad-ezer y lo había vencido: porque Toi era enemigo de Hadad-ezer. Y Joram llevaba en su mano vasos de plata, y vasos de oro, y de metal;
11Los cuales el rey David dedicó á Jehová, con la plata y el oro que tenía dedicado de todas las naciones que había sometido:
12De los Siros, de los Moabitas, de los Ammonitas, de los Filisteos, de los Amalecitas, y del despojo de Hadad-ezer hijo de Rehob, rey de Soba.
13Y ganó David fama cuando, volviendo de la rota de los Siros, hirió diez y ocho mil hombres en el valle de la sal.
14Y puso guarnición en Edom, por toda Edom puso guarnición; y todos los Idumeos fueron siervos de David. Y Jehová guardó á David por donde quiera que fué.
15Y reinó David sobre todo Israel; y hacía David derecho y justicia á todo su pueblo.
16Y Joab hijo de Sarvia era general de su ejército; y Josaphat hijo de Ahilud, canciller;
17Y Sadoc hijo de Ahitud, y Ahimelech hijo de Abiathar, eran sacerdotes; y Seraía era escriba;
18Y Benahía hijo de Joiada, era sobre los Ceretheos y Peletheos; y los hijos de David eran los príncipes.
(2 S. 8:1‑18)
;
2 S. 10:1‑19• 1Después de esto aconteció, que murió el rey de los hijos de Ammón: y reinó en lugar suyo Hanún su hijo.
2Y dijo David: Yo haré misericordia con Hanún hijo de Naas, como su padre la hizo conmigo. Y envió David sus siervos á consolarlo por su padre. Mas llegados los siervos de David á la tierra de los hijos de Ammón,
3Los príncipes de los hijos de Ammón dijeron á Hanún su señor: ¿Te parece que por honrar David á tu padre te ha enviado consoladores? ¿no ha enviado David sus siervos á ti por reconocer é inspeccionar la ciudad, para destruirla?
4Entonces Hanún tomó los siervos de David, y rapóles la mitad de la barba, y cortóles los vestidos por la mitad hasta las nalgas, y despachólos.
5Lo cual como fué hecho saber á David, envió á encontrarles, porque ellos estaban en extremo avergonzados; y el rey hizo decir les: Estaos en Jericó hasta que os vuelva á nacer la barba, y entonces regresaréis.
6Y viendo los hijos de Ammón que se habían hecho odiosos á David, enviaron los hijos de Ammón y tomaron á sueldo á los Siros de la casa de Rehob, y á los Siros de Soba, veinte mil hombres de á pie: y del rey de Maaca mil hombres, y de Is-tob doce mil hombres.
7Lo cual como oyó David, envió á Joab con todo el ejército de los valientes.
8Y saliendo los hijos de Ammón, ordenaron sus escuadrones á la entrada de la puerta: mas los Siros de Soba, y de Rehob, y de Is-tob, y de Maaca, estaban de por sí en le campo.
9Viendo pues Joab que había escuadrones delante y detrás de él, entresacó de todos los escogidos de Israel, y púsose en orden contra los Siros.
10Entregó luego lo que quedó del pueblo en mano de Abisai su hermano, y púsolo en orden para encontrar á los Ammonitas.
11Y dijo: Si los Siros me fueren superiores, tú me ayudarás; y si los hijos de Ammón pudieren más que tú, yo te daré ayuda.
12Esfuérzate, y esforcémonos por nuestro pueblo, y por las ciudades de nuestro Dios: y haga Jehová lo que bien le pareciere.
13Y acercóse Joab, y el pueblo que con él estaba, para pelear con los Siros; mas ellos huyeron delante de él.
14Entonces los hijos de Ammón, viendo que los Siros habían huído, huyeron también ellos delante de Abisai, y entráronse en la ciudad. Y volvió Joab de los hijos de Ammón, y vínose á Jerusalem.
15Mas viendo los Siros que habían caído delante de Israel, tornáronse á juntar.
16Y envió Hadad-ezer, y sacó los Siros que estaban de la otra parte del río, los cuales vinieron á Helam, llevando por jefe á Sobach general del ejército de Hadad-ezer.
17Y como fué dado aviso á David, juntó á todo Israel, y pasando el Jordán vino á Helam: y los Siros se pusieron en orden contra David, y pelearon con él.
18Mas los Siros huyeron delante de Israel: é hirió David de los Siros la gente de setecientos carros, y cuarenta mil hombres de á caballo: hirió también á Sobach general del ejército, y murió allí.
19Viendo pues todos los reyes que asistían á Hadad-ezer, como habían ellos sido derrotados delante de Israel, hicieron paz con Israel, y sirviéronle; y de allí adelante temieron los Siros de socorrer á los hijos de Ammón.
(2 S. 10:1‑19)
;
2 Cr. 14:1‑15• 1Y durmió Abías con sus padres, y fué sepultado en la ciudad de David. Y reinó en su lugar su hijo Asa, en cuyos días tuvo sosiego el país por diez años.
2E hizo Asa lo bueno y lo recto en los ojos de Jehová su Dios.
3Porque quitó los altares del culto ajeno, y los altos; quebró las imágenes, y taló los bosques;
4Y mandó á Judá que buscasen á Jehová el Dios de sus padres, y pusiesen por obra la ley y sus mandamientos.
5Quitó asimismo de todas las ciudades de Judá los altos y las imágenes, y estuvo el reino quieto delante de él.
6Y edificó ciudades fuertes en Judá, por cuanto había paz en la tierra, y no había guerra contra él en aquellos tiempos; porque Jehová le había dado reposo.
7Dijo por tanto á Judá: Edifiquemos estas ciudades, y cerquémoslas de muros con torres, puertas, y barras, ya que la tierra es nuestra: porque hemos buscado á Jehová nuestro Dios, hémosle buscado, y él nos ha dado reposo de todas partes. Edificaron pues, y fueron prosperados.
8Tuvo también Asa ejército que traía escudos y lanzas: de Judá trescientos mil, y de Benjamín doscientos y ochenta mil que traían escudos y flechaban arcos; todos hombres diestros.
9Y salió contra ellos Zera Etiope con un ejército de mil millares, y trescientos carros; y vino hasta Maresa.
10Entonces salió Asa contra él, y ordenaron la batalla en el valle de Sephata junto á Maresa.
11Y clamó Asa á Jehová su Dios, y dijo: Jehová, no tienes tú más con el grande que con el que ninguna fuerza tiene, para dar ayuda. Ayúdanos, oh Jehová Dios nuestro, porque en ti nos apoyamos, y en tu nombre venimos contra este ejército. Oh Jehová, tú eres nuestro Dios: no prevalezca contra ti el hombre.
12Y Jehová deshizo los Etiopes delante de Asa y delante de Judá; y huyeron los Etiopes.
13Y Asa, y el pueblo que con él estaba, lo siguió hasta Gerar: y cayeron los Etiopes hasta no quedar en ellos aliento; porque fueron deshechos delante de Jehová y de su ejército. Y les tomaron muy grande despojo.
14Batieron también todas las ciudades alrededor de Gerar, porque el terror de Jehová fué sobre ellos: y saquearon todas las ciudades, porque había en ellas gran despojo.
15Asimismo dieron sobre las cabañas de los ganados, y trajeron muchas ovejas y camellos, y volviéronse á Jerusalem.
(2 Cr. 14:1‑15)
;
2 Cr. 20:1‑37• 1Pasadas estas cosas, aconteció que los hijos de Moab y de Ammón, y con ellos otros de los Ammonitas, vinieron contra Josaphat á la guerra.
2Y acudieron, y dieron aviso á Josaphat, diciendo: Contra ti viene una grande multitud de la otra parte de la mar, y de la Siria; y he aquí ellos están en Hasasón-tamar, que es Engedi.
3Entonces él tuvo temor; y puso Josaphat su rostro para consultar á Jehová, é hizo pregonar ayuno á todo Judá.
4Y juntáronse los de Judá para pedir socorro á Jehová: y también de todas las ciudades de Judá vinieron á pedir á Jehová.
5Púsose entonces Josaphat en pie en la reunión de Judá y de Jerusalem, en la casa de Jehová, delante del atrio nuevo;
6Y dijo: Jehová Dios de nuestros padres, ¿no eres tú Dios en los cielos, y te enseñoreas en todos los reinos de las Gentes? ¿no está en tu mano tal fuerza y potencia, que no hay quien te resista?
7Dios nuestro, ¿no echaste tú los moradores de aquesta tierra delante de tu pueblo Israel, y la diste á la simiente de Abraham tu amigo para siempre?
8Y ellos han habitado en ella, y te han edificado en ella santuario á tu nombre, diciendo:
9Si mal viniere sobre nosotros, ó espada de castigo, ó pestilencia, ó hambre, presentarnos hemos delante de esta casa, y delante de ti, (porque tu nombre está en esta casa,) y de nuestras tribulaciones clamaremos á ti, y tú nos oirás y salvarás.
10Ahora pues, he aquí los hijos de Ammón y de Moab, y los del monte de Seir, á la tierra de los cuales ni quisiste que pasase Israel cuando venían de la tierra de Egipto, sino que se apartasen de ellos, y no los destruyesen;
11He aquí ellos nos dan el pago, viniendo á echarnos de tu heredad, que tú nos diste á poseer.
12Oh Dios nuestro! ¿no los juzgarás tú? porque en nosotros no hay fuerza contra tan grande multitud que viene contra nosotros: no sabemos lo que hemos de hacer, mas á ti volvemos nuestros ojos.
13Y todo Judá estaba en pie delante de Jehová, con sus niños, y sus mujeres, y sus hijos.
14Y estaba allí Jahaziel hijo de Zachârías, hijo de Benaías, hijo de Jeiel, hijo de Mathanías, Levita de los hijos de Asaph, sobre el cual vino el espíritu de Jehová en medio de la reunión;
15Y dijo: Oid, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalem, y tú, rey Josaphat. Jehová os dice así: No temáis ni os amedrentéis delante de esta tan grande multitud; porque no es vuestra la guerra, sino de Dios.
16Mañana descenderéis contra ellos: he aquí que ellos subirán por la cuesta de Sis, y los hallaréis junto al arroyo, antes del desierto de Jeruel.
17No habrá para qué vosotros peleéis en este caso: paraos, estad quedos, y ved la salud de Jehová con vosotros. Oh Judá y Jerusalem, no temáis ni desmayéis; salid mañana contra ellos, que Jehová será con vosotros.
18Entonces Josaphat se inclinó rostro por tierra, y asimismo todo Judá y los moradores de Jerusalem se postraron delante de Jehová, y adoraron á Jehová.
19Y levantáronse los Levitas de los hijos de Coath y de los hijos de Coré, para alabar á Jehová el Dios de Israel á grande y alta voz.
20Y como se levantaron por la mañana, salieron por el desierto de Tecoa. Y mientras ellos salían, Josaphat estando en pie, dijo: Oidme, Judá y moradores de Jerusalem. Creed á Jehová vuestro Dios, y seréis seguros; creed á sus profetas, y seréis prosperados.
21Y habido consejo con el pueblo, puso á algunos que cantasen á Jehová, y alabasen en la hermosura de la santidad, mientras que salía la gente armada, y dijesen: Glorificad á Jehová, porque su misericordia es para siempre.
22Y como comenzaron con clamor y con alabanza, puso Jehová contra los hijos de Ammón, de Moab, y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá, y matáronse los unos á los otros:
23Pues los hijos de Ammón y Moab se levantaron contra los del monte de Seir, para matarlos y destruirlos; y como hubieron acabado á los del monte de Seir, cada cual ayudó á la destrucción de su compañero.
24Y luego que vino Judá á la atalaya del desierto, miraron hacia la multitud; mas he aquí yacían ellos en tierra muertos, que ninguno había escapado.
25Viniendo entonces Josaphat y su pueblo á despojarlos, hallaron en ellos muchas riquezas entre los cadáveres, así vestidos como preciosos enseres, los cuales tomaron para sí, tantos, que no los podían llevar: tres días duró el despojo, porque era mucho.
26Y al cuarto día se juntaron en el valle de Beracah; porque allí bendijeron á Jehová, y por esto llamaron el nombre de aquel paraje el valle de Beracah, hasta hoy.
27Y todo Judá y los de Jerusalem, y Josaphat á la cabeza de ellos, volvieron para tornarse á Jerusalem con gozo, porque Jehová les había dado gozo de sus enemigos.
28Y vinieron á Jerusalem con salterios, arpas, y bocinas, á la casa de Jehová.
29Y fué el pavor de Dios sobre todos los reinos de aquella tierra, cuando oyeron que Jehová había peleado contra los enemigos de Israel.
30Y el reino de Josaphat tuvo reposo; porque su Dios le dió reposo de todas partes.
31Así reinó Josaphat sobre Judá: de treinta y cinco años era cuando comenzó á reinar, y reinó veinte y cinco años en Jerusalem. El nombre de su madre fué Azuba, hija de Silhi.
32Y anduvo en el camino de Asa su padre, sin apartarse de él, haciendo lo recto en los ojos de Jehová.
33Con todo eso los altos no eran quitados; que el pueblo aun no había enderezado su corazón al Dios de sus padres.
34Lo demás de los hechos de Josaphat, primeros y postreros, he aquí están escritos en las palabras de Jehú hijo de Hanani, del cual es hecha mención en el libro de los reyes de Israel.
35Pasadas estas cosas, Josaphat rey de Judá trabó amistad con Ochôzías rey de Israel, el cual fué dado á la impiedad:
36E hizo con él compañía para aparejar navíos que fuesen á Tharsis; y construyeron los navíos en Esion-geber.
37Entonces Eliezer hijo de Dodava de Mareosah, profetizó contra Josaphat, diciendo: Por cuanto has hecho compañía con Ochôzías, Jehová destruirá tus obras. Y los navíos se rompieron, y no pudieron ir á Tharsis.
(2 Cr. 20:1‑37)
;
Is. 37:1‑38• 1Aconteció pues, que el rey Ezechîas, oído esto, rasgó sus vestidos, y cubierto de saco vino á la casa de Jehová.
2Y envió á Eliacim mayordomo, y á Sebna escriba, y á los ancianos de los sacerdotes, cubiertos de sacos, á Isaías profeta, hijo de Amoz.
3Los cuales le dijeron: Ezechîas dice así: Día de angustia, de reprensión y de blasfemia, es este día: porque los hijos han llegado hasta la rotura, y no hay fuerza en la que pare.
4Quizá oirá Jehová tu Dios las palabras de Rabsaces, al cual envió el rey de Asiria su señor á blasfemar al Dios vivo, y á reprender con las palabras que oyó Jehová tu Dios: alza pues oración tú por las reliquias que aun han quedado.
5Vinieron pues los siervos de Ezechîas á Isaías.
6Y díjoles Isaías: Diréis así á vuestro señor: Así dice Jehová: No temas por las palabras que has oído, con las cuales me han blasfemado los siervos del rey de Asiria.
7He aquí que yo doy en él un espíritu, y oirá un rumor, y volveráse á su tierra: y yo haré que en su tierra caiga á cuchillo.
8Vuelto pues Rabsaces, halló al rey de Asiria que batía á Libna; porque ya había oído que se había apartado de Lachîs.
9Mas oyendo decir de Tirhakah rey de Etiopía: He aquí que ha salido para hacerte guerra: en oyéndolo, envió mensajeros á Ezechîas, diciendo:
10Diréis así á Ezechîas rey de Judá: No te engañe tu Dios en quien tú confías, diciendo: Jerusalem no será entregada en mano del rey de Asiria.
11He aquí que tú oiste lo que hicieron los reyes de Asiria á todas las tierras, que las destruyeron; ¿y escaparás tú?
12¿Libraron los dioses de las gentes á los que destruyeron mis antepasados, á Gozán, y Harán, Rezeph, y á los hijos de Edén que moraban en Thelasar?
13¿Dónde está el rey de Amath, y el rey de Arphad, el rey de la ciudad de Sepharvaim, de Henah, y de Hivah?
14Y tomó Ezechîas las cartas de mano de los mensajeros, y leyólas; y subió á la casa de Jehová, y las extendió delante de Jehová.
15Entonces Ezechîas oró á Jehová, diciendo:
16Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, que moras entre los querubines, sólo tú eres Dios sobre todos los reinos de la tierra; tú hiciste los cielos y la tierra.
17Inclina, oh Jehová, tu oído, y oye; abre, oh Jehová, tus ojos, y mira: y oye todas las palabras de Sennachêrib, el cual ha enviado á blasfemar al Dios viviente.
18Ciertamente, oh Jehová, los reyes de Asiria destruyeron todas las tierras y sus comarcas,
19Y entregaron los dioses de ellos al fuego: porque no eran dioses, sino obra de manos de hombre, leño y piedra: por eso los deshicieron.
20Ahora pues, Jehová Dios nuestro, líbranos de su mano, para que todos los reinos de la tierra conozcan que sólo tú eres Jehová.
21Entonces Isaías hijo de Amoz, envió á decir á Ezechîas: Jehová Dios de Israel dice así: Acerca de lo que me rogaste sobre Sennachêrib rey de Asiria,
22Esto es lo que Jehová habló de él: Hate menospreciado, y ha hecho escarnio de ti la virgen hija de Sión: meneó su cabeza á tus espaldas la hija de Jerusalem.
23¿A quién injuriaste y á quién blasfemaste? ¿contra quién has alzado tu voz, y levantado tus ojos en alto? Contra el Santo de Israel.
24Por mano de tus siervos denostaste al Señor, y dijiste: Yo con la multitud de mis carros subiré á las alturas de los montes, á las laderas del Líbano; cortaré sus altos cedros, sus hayas escogidas; vendré después á lo alto de su límite, al monte de su Carmel.
25Yo cavé, y bebí las aguas; y con las pisadas de mis pies secaré todos los ríos de lugares atrincherados.
26¿No has oído decir que de mucho tiempo ha yo lo hice, que de días antiguos lo he formado? Helo hecho venir ahora, y será para destrucción de ciudades fuertes en montones de ruinas.
27Y sus moradores, cortos de manos, quebrantados y confusos, serán como grama del campo y hortaliza verde, como hierba de los tejados, que antes de sazón se seca.
28Conocido he tu estado, tu salida y tu entrada, y tu furor contra mí.
29Porque contra mí te airaste, y tu estruendo ha subido á mis oídos: pondré pues mi anzuelo en tu nariz, y mi freno en tus labios, y haréte tornar por el camino por donde viniste.
30Y esto te será por señal: Comerás este año lo que nace de suyo, y el año segundo lo que nace de suyo: y el año tercero sembraréis y segaréis, y plantaréis viñas, y comeréis su fruto.
31Y el residuo de la casa de Judá que hubiere escapado, tornará á echar raíz abajo, y hará fruto arriba.
32Porque de Jerusalem saldrán reliquias, y del monte de Sión salvamento: el celo de Jehová de los ejércitos hará esto.
33Por tanto, así dice Jehová acerca del rey de Asiria: No entrará en esta ciudad, ni echará saeta en ella: no vendrá delante de ella escudo, ni será echado contra ella baluarte.
34Por el camino que vino se tornará, y no entrará en esta ciudad, dice Jehová:
35Pues yo ampararé á esta ciudad para salvarla por amor de mí, y por amor de David mi siervo.
36Y salió el ángel de Jehová, é hirió ciento ochenta y cinco mil en el campo de los Asirios: y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos.
37Entonces Sennachêrib rey de Asiria partiéndose se fué, y volvióse, é hizo su morada en Nínive.
38Y acaeció, que estando orando en el templo de Nisroch su dios, Adremelech y Sarezer, sus hijos, le hirieron á cuchillo, y huyeron á la tierra de Ararat; y reinó en su lugar Esar­hadón su hijo.
(Is. 37:1‑38)
company of spearmen.
or, beasts of the reeds.
multitude.
every.
scatter thou.
or, he scattereth.
delight.
 Another multitude of spearmen (warriors) gather for war (vs. 30). This perhaps is the armies of Gog attempting to overthrow re-established Israel (Ezk. 38:11-12). (Book 2. by B. Anstey)

J. N. Darby Translation

+
30
Rebuke the beast of the reeds, the assembly of the strong, with the calves of the peoples: every one submitteth himself with pieces of silver. Scatter the peoples that delight in war.