Salmo 130 (Spanish RV 1909) - Bible Truth Library

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Psalm 130

Sal. 130:4 KJV (With Strong’s)

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4

Butn there is forgiveness with thee, thato thou mayest be feared.

n

Éx. 34:7• ⁷Que guarda la misericordia en millares, que perdona la iniquidad, la rebelión, y el pecado, y que de ningún modo justificará al malvado; que visita la iniquidad de los padres sobre los hijos y sobre los hijos de los hijos, sobre los terceros, y sobre los cuartos. (Éx. 34:7)

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Dn. 9:9• ⁹De Jehová nuestro Dios es el tener misericordia, y el perdonar, aunque contra él nos hemos rebelado; (Dn. 9:9)

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Ro. 8:1• ¹Ahora pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme á la carne, mas conforme al espíritu. (Ro. 8:1)

o

Jer. 33:8‑9• ⁸Y los limpiaré de toda su maldad con que pecaron contra mí; y perdonaré todos sus pecados con que contra mí pecaron, y con que contra mí se rebelaron.
⁹Y seráme á mí por nombre de gozo, de alabanza y de gloria, entre todas las gentes de la tierra, que habrán oído todo el bien que yo les hago; y temerán y temblarán de todo el bien y de toda la paz que yo les haré. (Jer. 33:8‑9)

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2 Ti. 2:19• ¹⁹Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor á los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo. (2 Ti. 2:19)

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Sal. 25:11• ¹¹Por amor de tu nombre, oh Jehová, Perdonarás también mi pecado; porque es grande. (Sal. 25:11)

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Sal. 86:5• ⁵Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, Y grande en misericordia para con todos los que te invocan. (Sal. 86:5)

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Sal. 103:2‑3• ²Bendice, alma mía, á Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.
³El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias; (Sal. 103:2‑3)

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Éx. 34:5‑7• ⁵Y Jehová descendió en la nube, y estuvo allí con él, proclamando el nombre de Jehová.
⁶Y pasando Jehová por delante de él, proclamó: Jehová, Jehová, fuerte, misericordioso, y piadoso; tardo para la ira, y grande en benignidad y verdad;
⁷Que guarda la misericordia en millares, que perdona la iniquidad, la rebelión, y el pecado, y que de ningún modo justificará al malvado; que visita la iniquidad de los padres sobre los hijos y sobre los hijos de los hijos, sobre los terceros, y sobre los cuartos. (Éx. 34:5‑7)

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Is. 1:18• ¹⁸Venid luego, dirá Jehová, y estemos á cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos: si fueren rojos como el carmesí, vendrán á ser como blanca lana. (Is. 1:18)

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Is. 55:7• ⁷Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos; y vuélvase á Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. (Is. 55:7)

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Jer. 31:34• ³⁴Y no enseñará más ninguno á su prójimo, ni ninguno á su hermano, diciendo: Conoce á Jehová: porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice Jehová: porque perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado. (Jer. 31:34)

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Dn. 9:9• ⁹De Jehová nuestro Dios es el tener misericordia, y el perdonar, aunque contra él nos hemos rebelado; (Dn. 9:9)

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Mi. 7:18‑20• ¹⁸¿Qué Dios como tú, que perdonas la maldad, y olvidas el pecado del resto de su heredad? No retuvo para siempre su enojo, porque es amador de misericordia.
¹⁹El tornará, él tendrá misericordia de nosotros; él sujetará nuestras iniquidades, y echará en los profundos de la mar todos nuestros pecados.
²⁰Otorgarás á Jacob la verdad, y á Abraham la misericordia, que tú juraste á nuestros padres desde tiempos antiguos. (Mi. 7:18‑20)

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Ro. 8:1• ¹Ahora pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme á la carne, mas conforme al espíritu. (Ro. 8:1)

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2 Co. 5:19• ¹⁹Porque ciertamente Dios estaba en Cristo reconciliando el mundo á sí, no imputándole sus pecados, y puso en nosotros la palabra de la reconciliación. (2 Co. 5:19)

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Ef. 1:7• ⁷En el cual tenemos redención por su sangre, la remisión de pecados por las riquezas de su gracia, (Ef. 1:7)

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Col. 1:14• ¹⁴En el cual tenemos redención por su sangre, la remisión de pecados: (Col. 1:14)

that thou mayest.

Sal. 2:11‑12• ¹¹Servid á Jehová con temor, Y alegraos con temblor.
¹²Besad al Hijo, porque no se enoje, y perezcáis en el camino, Cuando se encendiere un poco su furor. Bienaventurados todos los que en él confían. (Sal. 2:11‑12)

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1 R. 8:39‑40• ³⁹Tú oirás en los cielos, en la habitación de tu morada, y perdonarás, y obrarás, y darás á cada uno conforme á sus caminos, cuyo corazón tú conoces; (porque sólo tú conoces el corazón de todos los hijos de los hombres;)
⁴⁰Para que te teman todos los días que vivieren sobre la haz de la tierra que tú diste á nuestros padres. (1 R. 8:39‑40)

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Jer. 33:8‑9• ⁸Y los limpiaré de toda su maldad con que pecaron contra mí; y perdonaré todos sus pecados con que contra mí pecaron, y con que contra mí se rebelaron.
⁹Y seráme á mí por nombre de gozo, de alabanza y de gloria, entre todas las gentes de la tierra, que habrán oído todo el bien que yo les hago; y temerán y temblarán de todo el bien y de toda la paz que yo les haré. (Jer. 33:8‑9)

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Os. 3:5• ⁵Después volverán los hijos de Israel, y buscarán á Jehová su Dios, y á David su rey; y temerán á Jehová y á su bondad en el fin de los días. (Os. 3:5)

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Hch. 9:31• ³¹Las iglesias entonces tenían paz por toda Judea y Galilea y Samaria, y eran edificadas, andando en el temor del Señor; y con consuelo del Espíritu Santo eran multiplicadas. (Hch. 9:31)

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2 Ti. 2:19• ¹⁹Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor á los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo. (2 Ti. 2:19)

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He. 12:24‑28• ²⁴Y á Jesús el Mediador del nuevo testamento, y á la sangre del esparcimiento que habla mejor que la de Abel.
²⁵Mirad que no desechéis al que habla. Porque si aquellos no escaparon que desecharon al que hablaba en la tierra, mucho menos nosotros, si desecháramos al que habla de los cielos.
²⁶La voz del cual entonces conmovió la tierra; mas ahora ha denunciado, diciendo: Aun una vez, y yo conmoveré no solamente la tierra, mas aun el cielo.
²⁷Y esta palabra, Aun una vez, declara la mudanza de las cosas movibles, como de cosas que son firmes.
²⁸Así que, tomando el reino inmóvil, vamos á Dios agradándole con temor y reverencia; (He. 12:24‑28)

• Second, if there is no standing before God through our own merits, there is forgiveness through His mercy. Third, if God forgives it is that He may be feared, and not that men may think lightly of their sin or of God’s mercy. Grace does not lead to a careless walk; on the contrary, it teaches us to live soberly, righteously, and godly (Ti. 2:12). (“Psalms 130” by H. Smith)

• For here it is not forgiveness in the sense of justification, though allied to it, but of government. But it is the question of the Lord's marking iniquity, not of oppression, though that were the outward rod that brought iniquity upon the soul from God's hand. (“Practical Reflections on the Psalms: Psalms 120-131” by J.N. Darby)

J. N. Darby Translation

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But there is forgiveness with thee, that thou mayest be feared.