La noche se pasa (#501)

 
La noche se pasa, las sombras se van;
La “Estrella del Alba” no puede tardar;
El día aguardamos con férvido afán;
Por ver su llegada bueno es madrugar.
El mundo äún duerme, no siente ni ve,
Dispuesto en la sombra de noche a quedar;
Mas si él “la venida gloriosa” no cree,
Al hijo del día bueno es madrugar.
¡Qué suerte dichosa por tal porvenir;
En luz refulgente su faz contemplar!
¡Oh, qué dignidad su semblanza adquirir!
¡Conviene por tal bendición madrugar!
Momento dichoso, Jesús, para Ti,
Tu Esposa querida a la gloria llevar,
Y su salvación consumando, así:
¡Qué gran desenlace! … ¡Bueno es madrugar!